Puerto Príncipe.
La capital haitiana se encuentra en la zona de medios de comunicación de las últimas noticias de los últimos días en el gobierno del joven y la crisis económica que atraviesa el país caribeño.
Las calles, usualmente colapsadas por el tráfico, se han visto vacías, luego, el cierre de las escuelas, las tiendas y las oficinas municipales, por ejemplo, el aumento de la violencia que ha dejado varios muertos y la incertidumbre en torno al gobierno de Moise.
Barricadas se levantaron en algunas áreas de la capital y otras ciudades, una medida que los manifestantes se tomaban las calles, se exigía la renuncia del gobernante a través de informes de mala administración y posible malversación de fondos.
Después de un tranquilo pero tenso comienzo del día, cientos de jóvenes de los barrios más pobres de la capital marcharon hacia Petionville, la zona más rica de Puerto Príncipe, arrojando piedras a las casas hasta que el policía lanzó gases lacrimógenos para detener la marcha, al menos un joven resulto muerto durante los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Corrupción
Los manifiestos exigen a Moise que renuncie por un escándalo centrado en el fondo Petrocaribe, bajo el cual Venezuela suministró el petróleo a Haití y otros los caribeños y el Centroamérica a precios reducidos y en condiciones crediticias favorables durante años.
Investigaciones han revelado que al menos 2,000 millones de dólares del programa fueron malversados. Además, un informe divulgado en enero incluyó una compañía que fue liderada por Moise como una beneficiaria de fondos para el proyecto de construcción de una carretera, para que nunca se firme contrato.
Durante su campaña electoral, Moise prometió "comida en cada plato y dinero en cada bolsillo". Sin embargo, la mayoría de los haitianos y la lucha para sobrevivir y enfrentar la inflación, del 15% desde la elección.
"Le pedimos a la policía que llegas a un jovenel Moise porque representa un peligro y una amenaza para la vida de cada haitiano", dijo Andre Michel, uno de los principales líderes opositores. “Él ya no tiene legitimidad: el país permanecerá en un punto muerto hasta que Jovenel Moise renuncie”, agregó.
Un grupo de mediación compuesto por un alto funcionario de la ONU, los embajadores de Francia, Alemania, Brasil, Canadá y Estados Unidos, la Unión Europea y la OEA, hicieron un llamado a los políticos haitianos para iniciar un diálogo sobre la crisis y lamentar la pérdida de vidas y los daños por las protestas.